Santo Domingo, RDHerald.- En un giro impactante de los acontecimientos, el ex congresista dominicano Miguel Andrés Gutiérrez Díaz ha admitido haber contribuido a la distribución de más de cinco toneladas de una mezcla de cocaína y conspirar para lavar dinero de la droga en Florida desde 2014 hasta 2020. Esta admisión se hizo en un acuerdo de culpabilidad con la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Florida el 22 de diciembre de 2020.
Según el acuerdo de culpabilidad, Gutiérrez Díaz conspiró a sabiendas y voluntariamente con otros para distribuir una sustancia controlada en los Estados Unidos, específicamente cinco kilogramos o más de una mezcla que contenía cocaína. Esta acción constituyó una violación de la legislación estadounidense y Gutiérrez Díaz ha aceptado la plena responsabilidad de sus actos.
El ex legislador del Partido Revolucionario Moderno (PRM) por la provincia de Santiago se declaró culpable de dos cargos de narcotráfico. El primer cargo se refiere a la distribución de más de cinco mil kilogramos de cocaína, mientras que el segundo es por conspirar para blanquear dinero procedente del narcotráfico.
Gutiérrez Díaz se enfrenta ahora a la posibilidad de un mínimo de 10 años de prisión y un máximo de cadena perpetua por el primer cargo. A esto le seguiría una pena de vigilancia de cinco años y una multa de hasta 10.000.000 de dólares. Por el segundo cargo, podría recibir una pena máxima de hasta 20 años de prisión, seguida de un periodo de supervisión de cinco años y una multa de hasta 10.000.000 USD.
Esta confesión ha conmocionado a la República Dominicana y al mundo político. Gutiérrez Díaz era una figura muy conocida y respetada en el país, y ocupaba el cargo de diputado por la provincia de Santiago. Su implicación en el tráfico de drogas y el blanqueo de dinero ha empañado su reputación y avergonzado a su antiguo cargo.
La Fiscalía del Distrito Sur de Florida ha declarado que este caso es un excelente ejemplo de su compromiso en la lucha contra el narcotráfico y el blanqueo de capitales. Seguirán trabajando con socios internacionales para llevar ante la justicia a los implicados en estas actividades ilegales.
La sentencia de Gutiérrez Díaz está prevista para marzo de 2021, y en ella deberá afrontar las consecuencias de sus actos. Este caso sirve para recordar que nadie está por encima de la ley y que los implicados en el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales tendrán que rendir cuentas por sus delitos.