Copiado de: El Mundo y Univision
Un vídeo exclusivo muestra cómo el líder del cártel Jalisco Nueva Generación gobierna la prisión a su antojo: música, whisky, armas y teléfono. «¡Viva Jalisco Nueva Generación!», grita ante el micrófono uno de los integrantes del grupo Los Buchones de Culiacán. Se escuchan vivas y aplausos.
Es el momento culminante de la fiesta organizada en el interior del penal estatal de Puente Grande, en Jalisco, por ‘Don Chelo’ el verdadero jefe del penal. «Aquí el que manda soy yo, pidan lo que quieran, yo les doy», dice el reo.MILENIO/EL MUNDO tiene en su poder un vídeo de dos horas de una fiesta organizada dentro de la cárcel por quien durante años ha mantenido el control de Puente Grande.
Es José Luis Gutiérrez Valencia, alias ‘El 77’, alias ‘El Ojo de Vidrio’, pero al que todo mundo conoce como ‘Don Chelo’. Gutiérrez Valencia, quien en otro tiempo se hizo llamar Antonio Herrera Ochoa, fue arrestado en enero del 2010 en Puerto Vallarta. En aquel entonces las autoridades lo identificaron como miembro del cártel de Sinaloa, para el que alguna vez trabajó. Hoy, este hombre que controla el Penal de Puente Grande para el Cartel Jalisco Nueva Generación, es padre de la pareja sentimental de Rubén Oseguera, alias ‘El Menchito’, hijo de ‘El Mencho’, líder de esa organización criminal.La fiesta se realizó hace poco más de un año. Aunque no tiene la fecha exacta, ocurrió entre diciembre de 2015 y marzo de 2016.
En el vídeo se puede ver a ‘Don Chelo’ siempre rodeado de hombres que portan fundas de las que se utilizan para armas largas. Dos de ellos están al corriente de lo que el jefe pueda necesitar. Detrás de ese primer grupo y separados por una franja de hombres de seguridad, se puede ver al resto de reos del penal disfrutando el concierto. Día de visita familiar, también se ven mujeres y niños. Corre el whiskyBuchanan’s. Sobran los celulares. Los cercanos a ‘Don Chelo’ traen camisas tipo polo.
Alguien pasa al escenario para dedicarle un poema al ‘Compa Chelo’.Dos grupos alternan en el escenario antes que llegue la atracción principal: Los Buchones de Culiacán. Tan pronto y aparecen, ‘Don Chelo’ y su grupo se levantan. Los ‘Buchones’ cantan al lado de ‘Don Chelo’ las canciones que él quiera. Entre canción y canción le hablan, por el micrófono, a los reos: «Primeramente quiero decirle que estoy agradecido con mi ‘compa Chelo’, con mi ‘compa Chava’, con todo el equipo. ‘Pa’ toda la gente, la gente nueva, la nueva generación que nos brindaron su amistad. ‘Los Buchones’ de Culiacán también somos amigos y somos gente (…) arriba la gente de Jalisco Nueva Generación, ‘compa’.
A mi ‘compa Chelo’, todo el equipo, toda la gente de Puente Grande, toda la gente de aquí, del pueblo, de parte de sus amigos de corazón, ‘Los Buchones de Culiacán'». En el vídeo no se ve a un solo guarda. En algún momento, avanzada la fiesta, un hombre de polo blanco con una radio de onda corta, que no hemos visto en la primera hora del vídeo, se le acerca a ‘Don Chelo’ para preguntarle si «todo está bien», si «necesita algo más». Gutiérrez Valencia habla poco en la fiesta, en algún momento pide el micrófono para hablarle a la población del penal. «Aquí no hay más quién manda, de aquí adelante. Pídanme, les voy a dar». Una hora después dice: «Aquí nadie se sale. Yo aquí hago lo que quiera.
El gobierno, lo respeto, lo respeto. Ustedes respétenme a mí. Siempre voy a hacer lo mío». Avanzada la fiesta, ‘Don Chelo’ y su grupo de protección son llevados a un cuarto rodeado de íconos religiosos, todos se sientan alrededor de una mesa y llegan unos tacos. En septiembre de 2015, MILENIO había documentado el autogobierno en el penal estatal de Puente Grande. Según un reporte oficial, la mayoría de las tiendas eran controladas por los reos, los presos controlaban el tráfico de sustancias prohibidas, el acceso a la sección de visita conyugal y el reparto de celdas. En aquel reportaje, un ex reo contaba que el jefe del penal era ‘Don Chelo’. El mismo que ahora vemos celebrando en el vídeo.
Puente Grande no es sólo el penal donde sucede la fiesta. Se llama el complejo penitenciario de Puente Grande porque ahí están un reclusorio preventivo, uno para mujeres, un centro de reclusión (estos tres estatales) y el penal federal. En su historia, todos los penales han tenido problemas. Del federal se fugó por primera vez ‘El Chapo’ hace 17 años, por ejemplo. En el último reporte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el penal donde sucede la fiesta sacó cero sobre diez en el rubro «Ausencia de internos que ejercen violencia o control sobre el resto de la población». En los últimos tres años, el gobierno estatal ha cambiado a los mandos del complejo penitenciario y ha hecho por lo menos tres operativos. El último, el pasado seis de abril.