El presidente del partido PRD y Canciller de la República, Miguel Vargas, dijo a la prensa que la supuesta campaña de descrédito que ha desatado una parte de la oposición política contra el gobierno tiene propósito sedicioso desde el momento en que planteó hacerle un juicio político al presidente Danilo Medina para ilegitimarlo y desbancarlo del poder.
Entrevistado en el programa radial El Sol de la Mañana, dijo que en relación con la Odebretch no predomina el interés de atacar la corrupción, que ciertamente es un problema en este y casi todos los países del mundo, sino que obedece al propósito de ganar en el debate público lo que no se consiguió en las urnas en mayo pasado.
Vargas citó encuestas recientes, “incluidas algunas hechas por empresas con afecto a esa oposición sediciosa”, como las del Centro Económico del Cibao y Alfonso, Cabrera y Asociados, que coinciden en que el Presidente Medina tiene más de un 50% de aceptación.
Observó que en algunas de esas encuestas, por ejemplo la Sigma 2, el Presidente Medina consigue un 61% de apoyo, prácticamente el mismo porcentaje con el que ganó las elecciones el año pasado.
“Lo relevante de estos resultados no es que el Presidente Medina mantenga el visto bueno de un porcentaje apreciable de la población, sino que el candidato perdedor no haya conseguido aumentar los números que obtuvo en las elecciones”, expuso.
A su juicio, se evidencia un fracaso y una prueba de que las “mentiras y ataques despiadados” contra el gobierno no han surtido efecto alguno.
Dijo que en la encuesta de Alfonso, Cabrera y Asociados se evidencia que más del 93% de los que votaron por Danilo para reelegirlo en mayo pasado, lo haría de nuevo si las elecciones fuesen hoy con los mismos candidatos.
“Claro, esta situación ha desesperado a la oposición sediciosa y de ahí que hayan arreciado sus ataques y mentiras, aprovechando los datos sobre la Odebretch que vienen del exterior. Porque el interés no es perseguir y cortar la corrupción. De ser así, celebrarían las tantas y tantas medidas que ha dispuesto la administración de Danilo Medina para contener el gasto público y evitar el mal uso de los recursos del Estado”, manifestó Vargas.
Manifestó que como ministro de Relaciones Exteriores puede testimoniar cuán exigentes son los controles del gasto y el monitoreo de los desembolsos. “Es prácticamente imposible librar un pago sin que esté debidamente justificado y conforme al presupuesto”.