New York, RDHerald.- A su regreso de un viaje a la República Dominicana en el que se reunió con el presidente Danilo Medina, los ex presidentes Hipólito Mejía y Leonel Fernández, el canciller Miguel Vargas Maldonado, otros líderes políticos y funcionarios en busca de apoyo a los taxistas dominicanos de la ciudad, el reverendo y concejal Rubén Díaz (padre), rechazó el piquete que el 2 de abril le montaron activistas anti trujillistas frente a la Iglesia Unida de la Comunidad que dirige en El Bronx, por haber recibido a Luis Ramfis Domínguez Trujillo, nieto del dictador Rafael Leonidas Trujillo, el jueves santo en un desayuno de la Organización de Ministros Cristianos que lidera.
Díaz, calificó de “irrespeto” a la religión el piquete y exhortó a los activistas que lo hagan frente a sus oficinas, donde hasta él mismo participaría.
“Una iglesia no es el lugar más adecuado para protestar y mucho menos contra el nieto de Trujillo que no es responsable de lo que hizo su abuelo”, dijo el reverendo hablando por teléfono con este reportero.
“A los almuerzos de la organización de ministros cristianos que dirijo, han venido Leonel, Danilo, el padre Rogelio, Hipólito Mejía, Miguel Vargas Maldonado, Abinader, el gobernador de Puerto Rico, a todos lo que vienen, los recibimos”, añadió.
Dijo que no hay que conocer a nadie, “son candidatos a quienes les damos la oportunidad que vengan a exponer lo que ofrecen”.
Agregó que Domínguez Trujillo, fue recibido como todos los demás.
Aclaró que esos encuentros no son políticos.
“Es la oportunidad que se les da a todos los aspirantes a la presidencia”, añadió.
Sobre las críticas de los activistas de que él respalda la propuesta de Domínguez Trujillo de construir un muro en la frontera dominicana con Haití, respondió que “cada país tiene derecho a tener sus propias leyes migratorias”.
Dijo que esas leyes hay que respetarlas. “Cada país tiene derecho a ejercer esas leyes, aunque incluyan un muro, porque El Vaticano tiene uno, eso no es nuevo en la vida, si un país desea poner un muro que lo ponga, si quiere una valla que la tenga, yo respeto eso”, sostuvo Díaz.
Y defendió su solidaridad cuando la República Dominicana es afectada por fenómenos naturales, cuando ha enviado miles de toneladas de comida, medicinas y comida.
“Lo que yo he hecho por la República Dominicana, muy pocos lo han hecho y eso, es conocido. Hemos mandado camiones a bomberos, autobuses a fundaciones y en Nueva York hacemos maratones. Mi solidaridad e identificación con los dominicanos es incuestionable”, dijo.
“La Biblia dice que los hijos no deben pagar por lo que hacen los padres y mucho menos los padres”, añadió.
“Mi posición contra los homosexuales y el aborto afecta a mi hijo Rubencito y me da pena que él sea culpado, porque no tiene nada que ver”, señaló.
“Quienes quieran piquetearme, que vengan a mis oficinas, porque estoy acostumbrado a las protestas de toda clase y no debieron hacerlo en una iglesia cristiana, porque es un irrespeto”, dijo.
